Lunes, 19:00 pm en algún barrio de Barcelona. Un grupo de amigos dispuestos a que Nuria no olvide su 30 cumpleaños jamás, ¿Lo conseguirán?
A Núria le dicen que se ponga guapa que la llevarán a cenar por su cumpleaños. El día anterior, su perro Harry, como quien no quiere la cosa, se revolcó en el parque (más de la cuenta) para que Nuria le tuviera que dar un baño. Él también sabía que debía ir de etiqueta a la fiesta.
Mientras tanto, en otro punto de la ciudad, 8 amigos van a comprar globos de helio para decorar el estudio fotográfico. También compran la chuche favorita de Harry. Harry y queso son sinónimos. Yo preparo 10 sillas para que todos estén acomodados para ver la gran función, ¡Harry y Núria posando ante mi cámara para inmortalizar el comienzo de los 30!
Ojalá hubiera tenido la cámara lista cuando le abrí la puerta a Núria para capturar su expresión. ¡No entendía nada! Un montón de amigos esperándola en un lugar desconocido y un chico (yo) que le da la bienvenida y le acompaña hasta el plató. Cuando entendió a qué venía no pudo parar de reír y disfrutar en toda la sesión.
Todos sus amigos estaban allí celebrando junto a ella y su querido Harry un día muy especial. Harry posó primero para romper el hielo. Venía con su maletita perruna llena de cambios de vestuario: pajarita, corona de rey, gafas… y tampoco faltaron sus fotos de desnudo integral. Más tarde Nuria fue posando junto a las personas importantes en su vida: novio, hermana y un montón de amigos que le demostraron cuánto la quieren.
Y tú… ¿Recuerdas qué hiciste para celebrar tu último cumpleaños? ¡Nuria seguro que no lo olvidará jamás.
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«Fue uno de los mejores regalos que me han podido hacer ( sin exagerar,de verdad). Una tarde inolvidable: Paco, amigos y fotos ¡sin duda genial.
¡Volvería a repetirlo con los ojos cerrados!»
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